Crónica Cantabria.

Crónica Cantabria.

"Arranca el 1 de abril la temporada de pesca de salmón y trucha en los ríos de Cantabria."

Los aficionados a la pesca en Cantabria se enfrentarán a una serie de limitaciones en la próxima temporada, ya que se ha decidido prohibir la pesca en varios cotos de salmón del río Deva, entre ellos El Arenal, El Inferno, La Vide, Lágrimas, Matadero y San Julián, debido a las obras de mejora en la carretera nacional N-621. Este hecho es sin duda una preocupación para muchos pescadores que dependen de estos espacios para disfrutar de su afición.

Según la normativa establecida en la Orden DES/01/2025, publicada el pasado jueves en el Boletín Oficial de Cantabria, las temporadas de pesca para el salmón y otras especies se iniciarán el 1 de abril, mientras que la captura del cangrejo señal sólo será permitida a partir del 1 de julio. Esta decisión refleja una vez más la regulación estricta que se impone en la pesca en la región, buscando equilibrar la conservación de especies con el disfrute de los pescadores.

La temporada de salmón se cerrará cuando se alcance el cupo máximo de capturas permitido en cada río, o el cupo ampliado en casos específicos. No obstante, el hecho de que se impida la obtención de permisos en los cotos de salmón del río Deva durante todo el 2025 por las obras programadas representa un golpe directo para quienes consideran estos lugares como esenciales para la práctica de la pesca deportiva.

El periodo de captura de la trucha y otras especies cerrará el 31 de julio, mientras que para el cangrejo terminará el 15 de octubre, salvo en los casos que se contemplan en las excepciones. Este enfoque continúa la tradición de regular la pesca en función de la sostenibilidad, que es un principio fundamental que debemos valorar en cuanto a la conservación de nuestros recursos hídricos.

Los pescadores tendrán la posibilidad de practicar su afición solo en ciertos días de la semana: martes, miércoles, viernes, sábados y domingos, además de en días festivos nacionales o regionales. Sin embargo, hay que tener en cuenta las excepciones específicas que existen para cada cuenca, lo que complica un poco las cosas para aquellos que planean salir a pescar.

Respecto a los horarios, se establecerán varían significativamente a lo largo del año. Desde las 9:00 hasta las 18:00 horas en los meses de enero a marzo, hasta horarios de 6:30 a 23:00 en julio. Estos detalles son cruciales para que los pescadores puedan organizar sus jornadas de manera efectiva, adaptándose a las regulaciones que parecen más estrictas cada año.

En cuanto a los cupos de salmón, se permitirá a cada pescador capturar un ejemplar por día, con un límite de dos por temporada, lo que se considera una medida prudente para asegurar que las poblaciones de salmón no se vean comprometidas. Para los ríos específicos, los cupos anuales permitidos se fijan en 25 para el Asón, 25 para el Pas, y 10 tanto para el Nansa como para el Deva, lo que garantiza un control riguroso sobre la pesca en estos ecosistemas sensibles.

Curiosamente, si los pescadores logran alcanzar más del 50% del cupo máximo antes del 31 de mayo, se permitirá una ampliación automática de cinco ejemplares más, un incentivo para aquellos que buscan maximizar sus días de pesca. Sin embargo, en lo que respecta a la trucha, la captura se limita a cinco ejemplares por día, al tiempo que no se fijan cupos para el cangrejo y otras especies, lo que podría generar cierta preocupación sobre el manejo de estas últimas.

Respecto a las tallas mínimas, los pescadores deberán respetar las normativas que establecen un tamaño mínimo de 45 centímetros para el salmón atlántico y de 21 centímetros para la trucha común. Sin embargo, para otras especies no se ha dispuesto de tallas mínimas, lo que podría dar lugar a discusiones sobre la sostenibilidad y la conservación de estas especies en particular.