En Cantabria, durante el año 2023, se reportaron un total de 306 agresiones a profesionales sanitarios, lo que representa un aumento del 21,4% con respecto al año anterior. Estos datos provienen de la última memoria sobre agresiones a trabajadores de la salud en la región, la cual señala que la mayoría de estos incidentes involucraron a médicos en el ámbito de la Atención Primaria, y fueron cometidos por pacientes. En su mayoría, las agresiones (78%) fueron dirigidas a mujeres, mientras que el resto (22%) afectó a hombres.

En términos específicos, la memoria destaca que la categoría profesional más impactada fue la de los médicos, con 96 casos notificados, seguidos por las enfermeras, con 80, y el personal administrativo, con 78.

Además, se registraron 32 agresiones contra técnicos de cuidados auxiliares de enfermería, 14 contra celadores, tres contra higienistas dentales, dos contra fisioterapeutas y una contra odontólogos.

Los administrativos presentaron el índice de incidencia más alto, con 71,95 por cada 1.084 trabajadores, mientras que los fisioterapeutas registraron el menor índice, con 10,52.

La mayoría de las agresiones tuvieron lugar en Atención Primaria, con 214 casos, seguido por el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, con 65 casos. Los hospitales de Laredo y Sierrallana reportaron menos incidentes, con 15 y 12 respectivamente.

En cuanto a los responsables de estas agresiones, se identificó que el 72% fueron pacientes, seguidos por familiares en un 25%. Solo el 21% de las agresiones fueron denunciadas ante alguna autoridad, y en la mayoría de los casos (32%) no se tomó ninguna acción administrativa. El 48% recibió una carta de advertencia, y el 10% fue llevado a instancias judiciales.

Estos preocupantes datos fueron discutidos en una reunión entre el presidente del Foro Sanitario de Cantabria y decano del Colegio de Fisioterapeutas de la región, Jorge Fernández, y el director general de Planificación, Ordenación, Gestión del Conocimiento y Salud Digital, Óscar Fernández Torre.

El Foro Sanitario de Cantabria ha expresado una "preocupación significativa" por la seguridad de los profesionales sanitarios en el desempeño de sus labores. Fernández hizo hincapié en la importancia de mantener políticas de prevención y respuestas rápidas ante las agresiones, asegurando que cada incidente sea tratado con seriedad.

En esta línea, se discutió la revisión de la Ley de Ordenación Sanitaria de Cantabria (LOSCAN), que ha sido modificada recientemente para incluir sanciones por faltas menos graves, como insultos y agresiones verbales leves. Estas modificaciones ahora se aplican también al personal sanitario del sector privado, con el objetivo de que todas las formas de violencia hacia los trabajadores de la salud sean sancionadas adecuadamente.

La reunión concluyó con el compromiso de continuar colaborando en la implementación de estrategias efectivas que garanticen un entorno laboral seguro y respetuoso para todos los profesionales sanitarios en la región de Cantabria.

El encuentro, que tuvo lugar en las oficinas de la Consejería de Salud, contó con la participación de diversas figuras importantes en el ámbito sanitario de la región, como el presidente del Colegio de Odontólogos, el presidente del Colegio de Psicólogos, la presidenta del Colegio de Farmacia, el presidente del Colegio de Medicina y la representación del Colegio de Enfermería.