SANTANDER, 31 Oct. - La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, y los consejeros del Gobierno (PP) han renunciado al incremento retributivo de casi un 20 por ciento recogido en el proyecto de ley de los presupuestos de Cantabria para 2024.
En un primer momento, las cuentas elaboradas para el año que viene establecían que la presidenta regional pasaba de cobrar los 65.555 euros de su antecesor, Miguel Ángel Revilla (PRC), a 77.634 euros brutos al año (+18,4%), y los consejeros de 62.575 a 74.581 euros (+19%).
Tras conocerse dichas cifras, la consejera de Presidencia, Isabel Urrutia, explicaba esta mañana en rueda de prensa que con este aumento en las retribuciones de la presidenta y los consejeros se pretendía corregir los "desequilibrios" entre sus sueldos, que han permanecido "casi inalterados" desde 2010, con los de otros cargos con "menos responsabilidad" política y jurídica.
Asimismo, apuntaba que, a pesar de esta subida, el coste total del actual Gobierno (PP) seguía siendo "inferior" al del anterior (PRC-PSOE), dado que no tiene vicepresidente y ha eliminado una dirección general y una subdirección general.
Las críticas de la oposición no se hicieron esperar. El secretario general del PSOE de Cantabria, Pablo Zuloaga, consideraba un "escándalo" esta subida de sueldos, mientras que los regionalistas la veían "excesiva" y pedían "reconsiderarla". Por su parte, Vox recordaba que votó en contra de la subida salarial de los diputados e insistía en la necesidad de reducir el gasto político.
Es por ello que, tras la polémica suscitada al respecto, y para no "enturbiar" las cuentas de la región elaboradas para el año que viene, Buruaga y los consejeros han decidido renunciar a dicho aumento retributivo.