Crónica Cantabria.

Crónica Cantabria.

Cantabria: el área con mayor riesgo de inundaciones costeras en España.

Cantabria: el área con mayor riesgo de inundaciones costeras en España.

En un reciente análisis sobre los riesgos que enfrenta el parque de viviendas en España, se ha revelado que Cantabria se posiciona como la comunidad autónoma con mayor vulnerabilidad a inundaciones costeras. Este informe indica que un alarmante 9% de las viviendas de la región, lo que se traduce en 34.349 de un total de 379.265, están ubicadas en zonas propensas a inundaciones, la mayoría de las cuales presentan probabilidades consideradas como medias u ocasionales. Localidades como Santoña, Laredo, Escalante, Val de San Vicente y Colindres son las más afectadas por esta situación.

El Mapa de riesgos del parque de viviendas en España para el año 2024, elaborado por ST Analytics, una compañía que forma parte del Grupo Sociedad de Tasación y se especializa en análisis de datos para el sector inmobiliario, fue la fuente de esta preocupante información. Este estudio no solo muestra los niveles de riesgo de inundación, sino que también destaca la relevancia de contar con un análisis sólido que ayude a la planificación y prevención de desastres en las áreas más vulnerables.

El informe establece que a nivel nacional, un 1,3% de las viviendas en España se encuentra en zonas con algún grado de riesgo de inundaciones costeras, lo que se traduce en 331.169 residencias de un total de 25,8 millones. Este dato subraya la importancia de considerar la planificación urbanística en función de estos riesgos, para evitar pérdidas humanas y materiales en el futuro.

La categoría de riesgo de inundación costera se establece en función de la probabilidad de que se produzcan inundaciones en un periodo determinado. Esta escala, que se desarrolla a partir de estadísticas facilitadas por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), se divide en tres niveles: zonas inundables con probabilidad media o ocasional, que corresponden a un tiempo de retorno de 100 años; zonas inundables con probabilidad baja o excepcional, con un tiempo de retorno de 500 años; y zonas no inundables, donde no se espera que ocurran inundaciones costeras.

Siguiendo esta clasificación de riesgo costero, Cantabria lidera las estadísticas, seguida de Las Palmas, donde un 6% de las viviendas están en riesgo medio u ocasional, lo que equivale a 30.774 viviendas de un total de 517.275. Los municipios más vulnerables dentro de esta provincia son Haría, La Oliva, Agüimes, Tinajo y la propia capital, Las Palmas de Gran Canaria.

El documento en cuestión también realiza un exhaustivo análisis de los 25,8 millones de viviendas en España hasta octubre de 2024, abordando tres tipos de riesgos: fluviales, sísmicos y costeros. En términos generales, el informe concluye que casi 2,3 millones de viviendas están en riesgo fluvial, más de 5 millones enfrentan un riesgo sísmico "muy alto", y más de 330.000 están expuestas al riesgo costero.

Particularmente en el ámbito de inundaciones, el informe destaca que un 9% de las viviendas en España se encuentran en áreas con algún nivel de riesgo, una cifra que representa cerca de 2,3 millones de residencias en términos absolutos, un dato que debería alertar a las autoridades sobre la urgencia de implementar medidas de mitigación y adaptación.

En cuanto a riesgos fluviales, Valladolid se erige como la provincia más expuesta, con un asombroso 41% de sus viviendas en riesgo, lo que equivale a 118.600 residencias sobre un total de 292.774. Entre los municipios más afectados se encuentran San Miguel del Pino, Viana de Cega, la capital vallisoletana, Simancas y Tudela de Duero, lo que plantea serias interrogantes sobre la efectividad de la infraestructura de drenaje y gestión de aguas en la región.

Le sigue la región de Murcia, que presenta un 35% de sus viviendas en riesgo, es decir, 298.043 de un total de 839.559. Entre sus localidades más vulnerables destacan Beniel, Murcia capital, Torre-Pacheco, La Unión y Los Alcázares, lo que pone de relieve la necesidad de una mayor inversión en proyectos de infraestructura resiliente.

En tercer lugar, Sevilla también se enfrenta a desafíos significativos, con un 26% de sus viviendas en peligro, lo que supone 229.294 de un total de 889.322. Las áreas más expuestas son La Algaba, Villaverde del Río, Gelves, El Palmar de Troya y Camas, sugiriendo que la planificación urbana debe ser repensada para salvaguardar a sus ciudadanos.

Por su parte, Girona se sitúa en la cuarta posición, con un 22% de sus viviendas en riesgo, sumando 108.776 sobre 484.513 en total. Entre los municipios más vulnerables se encuentran Vila-Sacra, Albóns, Sant Pere Pescador, Bellcaire d’Empordà y Cabanes, lo que resalta la diversidad de los retos que enfrenta cada comunidad autónoma.

En contraste, las provincias que menos riesgo enfrentan en cuanto a inundaciones son Cádiz, Málaga y Segovia, planteando un panorama positivo para estas áreas y la necesidad de fortalecer la preparación de políticas en regiones más vulnerables.

A nivel nacional, un 19,3% del parque residencial presenta un nivel de exposición muy alto al riesgo sísmico, lo que equivale a casi 5 millones de viviendas. Este riesgo se determina por la probabilidad de que ocurran fenómenos sísmicos en el territorio español, siendo fundamental considerar esta variable en la construcción de nuevas infraestructuras.

Por provincias, las que presentan la mayor incidencia de riesgo sísmico son Granada, Alicante y Almería, donde un alarmante 99% de sus viviendas se encuentran en áreas clasificadas con un nivel "muy alto" de riesgo. Esto se debe a su proximidad a la costa del Mar de Alborán y a la falla de Averroes. Municipios como Atarfe, La Zubia y Churriana de la Vega en Granada; Santa Pola, Elda y Mutxamel en Alicante; y Almería capital, Roquetas de Mar y Vera en Almería son ejemplos de esta realidad.

La situación en Málaga es igualmente preocupante, con un 96% de sus viviendas, es decir 959.018 de 995.926, ubicadas en zonas de alto riesgo sísmico. Localidades como Marbella, Mijas y Fuengirola se destacan por sus altos niveles de vulnerabilidad, lo que sugiere que deben tomarse medidas urgentes para aumentar la resiliencia de estas zonas.

Por último, Valencia se posiciona con un 69% de sus viviendas expuestas, es decir, 1.017.330 de un total de 1.474.549. Entre sus municipios más vulnerables se encuentran Gandía, Sueca y Oliva, que requieren atención prioritaria en materia de previsión de riesgos.

Murcia también ocupa un lugar destacado en el ranking, con un 62% de su parque residencial catalogado en el nivel más alto de riesgo sísmico, lo que se traduce en 522.107 viviendas de 839.559. Municipios como Molina de Segura, Cehegín y Abarán destacan por tener una mayor incidencia en este ámbito, haciendo imperativa la implementación de políticas que mitiguen estos peligros.