Un hombre ha sido sentenciado a dos años de prisión tras aceptar su culpabilidad en un caso de abuso sexual a un menor de catorce años, el hijo de amigos cercanos. La situación ha conmocionado a la comunidad, dado que los hechos ocurrieron durante una celebración familiar en un ambiente que se presumía seguro.

La Audiencia Provincial de Cantabria ha confirmado la pena, la cual no solo implica la cárcel, sino también medidas de protección para el menor. Según un comunicado emitido por el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, las partes implicadas decidieron llegar a un acuerdo antes del inicio del juicio, que se había programado en la Sección Primera de la Audiencia.

El tribunal ha dispuesto que el condenado no solo perderá su libertad, sino que también estará bajo un régimen de libertad vigilada, se le ha prohibido interactuar con menores y se le ha impuesto una orden de alejamiento del menor afectado durante seis años. Asimismo, el hombre deberá compensar al joven con 4.000 euros por los daños morales causados.

Los detalles del caso, expuestos en el escrito de la Fiscalía, indican que el abuso ocurrió en una casa rural donde el menor y su familia estaban alojados del 31 de diciembre al 3 de enero de 2023. En la madrugada del 1 de enero, el acusado se desnudó y se metió en la cama junto al menor, iniciando así una serie de acciones inapropiadas que fueron rápidamente rechazadas por la víctima.

El menor intentó resistirse, pero el hombre lo amenazó al sujetarle la mano, obligándolo a participar en un acto que claramente sobrepasó los límites. Finalmente, tras zafarse de las agresiones, el joven la tomó como una señal para abandonar la habitación y poner fin a la situación de peligro.