• sábado 25 de marzo del 2023

El consumo de cannabis incrementa y todavía es la substancia ilegal mucho más consumida en Cantabria

img

El consumo de alcohol sigue permanente y se disminuye el de tabaco

SANTANDER, 4 Ene.

La Consejería de Sanidad ha analizado los indicadores que constituyen la encuesta bienal sobre alcohol y drogas en España (EDADES)
2022 y ha visto un aumento del consumo de cannabis en Cantabria, que todavía es la substancia ilegal mucho más consumida en la zona.

Según comunica el Ejecutivo cantabrio en un aviso, el consumo de cannabis ha incrementado en los últimos años, ya que el 44% de los cantabrios lo probó, cifra que se ubica sobre la media nacional.

Por tramos de edad, el consumo de esta sustancia es superior en los hombres de entre 15 y 34 años (bajo la media nacional), más allá de que la edad media de comienzo de su consumo se ubica, de la misma en el resto del territorio nacional, entre los 18 y los 19 años.

En general, los usuarios de cannabis son experimentales y eventuales, si bien el 11,2% de la gente que ha consumido esta substancia ilegal en el último año muestra un patrón de consumo de peligro, un número que asimismo ha incrementado.

La encuesta EDADES está promovida por el Plan Nacional de Drogas en colaboración con las comunidades autónomas, que amplían el censo muestral en su territorio. En esta ocasión, el sondeo se hizo entre la población de 15 a 64 años que radica en hogares familiares.

Según todos y cada uno de los indicadores, el alcohol es, con diferencia, la substancia que mucho más consume la población cantabria, más allá de que su consumo sigue permanente, puesto que el 93,2% de los encuestados ha consumido alcohol en algún momento en la vida. La cerveza, seguida del vino, son las
bebidas alcohólicas mucho más usadas.

Si charlamos de consumo frecuente, los datos patentizan un mayor consumo períodico entre los mayores de 55 años y residual (1%) entre los mucho más jóvenes (de 15 a 24 años). Sin embargo, el 73% de los jóvenes entre 25 y 34 años han bebido alcohol en el último mes.

Respecto a las intoxicaciones etílicas, entre las secuelas mucho más repentinas del consumo de alcohol, se aprecia mayor prevalencia en hombres jóvenes, entre 15 y 34 años, ya que el 40% de ellos se han emborrachado en algún momento en el último año.

A partir de esa edad, desciende el número de intoxicaciones etílicas, si bien siempre y en todo momento es mayor entre los hombres.

El llamado atracón (binge drinking) o la ingesta en un máximo de 2 horas de cinco o mucho más bebidas alcohólicas, en la situacion de los hombres, o de 4 si son mujeres, es mucho más frecuente entre los primeros (17% en oposición al 7% de mujeres), y mayor en la franja mucho más joven de edad, 15-24 años, con un 27,5%.

Además, el 12% de los cantabrios reconoce haber efectuado este género
de ingesta de alcohol en los últimos 30 días. El 37% de los jóvenes cantabrios de entre 15 y 24 años admite que hizo en algún momento botellón.

Entre los datos positivos de la encuesta, tanto en hombres como en mujeres, figura un descenso de consumos de peligro, como el consumo períodico alto, que puede conducir con mucho más posibilidad a una dependencia. Aún de esta forma, este consumo de peligro es mucho más prevalente entre los menores de 35 años.

Respecto al tabaco, como apunte positivo figura un descenso en las prevalencias de consumo tanto de manera ocasional como frecuente. Así, el 36% de los cantabrios ha fumado en el último año, pero la prevalencia baja hasta el 31,5% si charlamos de consumo períodico.

La encuesta refleja que son los hombres los que fuman mucho más todos los días (el 34% en oposición al 29% de las mujeres) y los de mayor edad (34% de fumadores entre los 35 y 64 años, con relación al 26% entre 15 a 34 años). Además, los hombres fuman mucho más cantidad que las mujeres, a razón
de 12,7 cigarros en frente de diez,6.

En cuanto al cigarro electrónico, prácticamente un 9% de los cantabrios lo ha empleado en algún momento, pero el consumo recurrente de esta manera es minoritario.

Si charlamos de cocaína, la prevalencia de los encuestados que refieren haberla consumido en algún momento en la vida ha disminuido y se ubica en el 7%, bajo la media nacional.

Siguiendo la tónica de consumo de otras substancias, está mucho más popularizada entre los hombres y la media de comienzo de tal consumo es mucho más tardía que para el cannabis, 21 años, igual que en el grupo nacional.

El policonsumo de 2 o mucho más substancias es asimismo más frecuente entre hombres de 15 a 34 años, más allá de que se aprecia un descenso en Cantabria.
En las adicciones sin substancia, el 54% de los cantabrios jugó de manera presencial y el 9% en línea, porcentajes los dos bajo la media nacional.

En Cantabria, según se desprende de los últimos datos, hay una fuerte concienciación sobre el peligro de consumir substancias psicoactivas, pero es menor en la situacion del consumo ocasional de alcohol, tranquilizantes, cannabis o medicamentos opioides.

En general, hay poca diferencia por sexo, pero las mujeres están mucho más concienciadas de los peligros que acarrea el consumo de cannabis o las copas del fin de semana. Además, en armonía con los desenlaces de las precedentes investigaciones, la substancia mucho más libre, según los encuestados, es el cannabis, si bien en un porcentaje inferior.

En general, los jarros estiman que el inconveniente de las drogas en su ambiente es poco esencial. Solo un 24% piensa que hay un inconveniente importante.

En este sentido, el 80% de los encuestados cree esencial la adecuada educación en las academias y el 76% el régimen voluntario a los usuarios.

Más información

El consumo de cannabis incrementa y todavía es la substancia ilegal mucho más consumida en Cantabria