En Santander, un conductor de 61 años fue detenido la noche pasada por circular en estado de ebriedad y agredir a los policías locales que lo detuvieron.

Los hechos ocurrieron cerca de las 23.00 horas en el Paseo de General Dávila, cuando los agentes que patrullaban la zona observaron la conducción errática y lenta del vehículo del infractor.

Tras detenerlo, se percataron de que el conductor mostraba signos de intoxicación alcohólica evidente, por lo que se le pidió que se sometiera a la prueba de alcoholemia, la cual arrojó un resultado positivo en el etilómetro indiciario.

Se requirió la presencia de la Unidad de Atestados para realizar la prueba en el etilómetro evidencial mientras el individuo adoptaba una actitud agresiva y amenazante hacia los agentes, llegando incluso a agredir a uno de ellos antes de ser detenido después de un altercado.

Una vez bajo custodia, se confirmó que el conductor superaba el límite de alcohol permitido en más del triple, lo que resultó en la apertura de diligencias judiciales por atentado a agente de la autoridad y contra la seguridad vial.

En otro suceso ocurrido el miércoles, una mujer de 46 años resultó herida en un accidente entre una motocicleta y un automóvil en la calle Guevara de la capital cántabra, siendo trasladada al Hospital de Valdecilla para recibir atención médica.