En un esfuerzo por modernizar y optimizar la atención sanitaria, Cantabria ha lanzado un innovador Plan de Salud Digital que promete transformar radicalmente el sistema de salud de la región. Este plan, que se enmarca dentro de la Agenda Digital de Cantabria 2024-2028, se apoya en el uso de tecnologías avanzadas para mejorar la atención médica, aliviar la carga laboral de los profesionales de la salud y proporcionar cuidados más cercanos a los ciudadanos.

El consejero de Salud, César Pascual, presentó esta ambiciosa iniciativa en el Hospital Valdecilla el viernes pasado. Pascual señaló que esta digitalización permitirá que los pacientes sean monitorizados en sus hogares, así como acceder a sus datos médicos a través de aplicaciones móviles. Se espera que estas herramientas reduzcan la necesidad de ingresos hospitalarios y optimicen el uso de camas, garantizando que los tratamientos sean ofrecidos con la misma calidad que en las instalaciones hospitalarias.

El Plan de Salud Digital representará una inversión significativa, con un total de 98 millones de euros, lo que equivale a casi una cuarta parte del presupuesto total de la Agenda Digital, que suma 397 millones. Además, el consejero manifestó su esperanza de obtener más financiación de la Unión Europea para fortalecer aún más este proyecto en el futuro cercano.

Pascual subrayó la magnitud del cambio que está por venir, afirmando que con la implementación de este plan, marcará un "antes y un después" en la asistencia sanitaria en Cantabria. Se establecen así bases claras para lograr una atención más accesible, equitativa y adaptada a las necesidades de los ciudadanos.

El consejero destacó que, con este plan, no solo se abordarán las listas de espera y se mejorarán las infraestructuras sanitarias, sino que también se definirá el rumbo de la atención sanitaria en la región. "El futuro de la sanidad de Cantabria queda delineado con este plan", sentenció Pascual, reflejando la ambición detrás de esta iniciativa.

Una de las propuestas más emocionantes incluye la posibilidad de que los pacientes sean monitorizados en tiempo real, lo que permitirá que, en caso de un deterioro en su salud, la inteligencia artificial emita alertas a los médicos, facilitando decisiones más rápidas y efectivas. Esta estrategia tiene como objetivo evitar que los pacientes se desplacen a los centros de salud, reduciendo el riesgo de complicaciones adicionales.

Asimismo, esta digitalización aliviará la carga asistencial al disminuir el número de visitas a consultas y, en consecuencia, disminuirá la carga administrativa de los médicos de Atención Primaria. Esto les permitirá dedicar más tiempo a escuchar y atender inquietudes de sus pacientes, lo cual es crucial para una atención de calidad.

Otro aspecto clave del Plan es la promoción de la hospitalización domiciliaria, que beneficiará a aquellos pacientes con afecciones que tradicionalmente requerían estancias prolongadas en el hospital. Esto no solo les permitirá pasar más tiempo en sus hogares, sino que también se ofrecerán tratamientos con garantías equivalentes a los ofrecidos en los centros de salud.

Finalmente, la estrategia incluye la premisa de "prevenir antes que curar", incentivando a los ciudadanos a utilizar aplicaciones que les permitan consultar sus registros de salud y recibir recomendaciones personalizadas. Pascual enfatizó que el cuidado de la salud comienza antes de la visita médica, instando a los ciudadanos a asumir una mayor responsabilidad en su bienestar cotidiano y no depender exclusivamente del sistema sanitario para su salud.