En un esfuerzo coordinado por el Gobierno regional de Cantabria, un destacamento de 30 bomberos y 14 voluntarios municipales han sido desplegados para asistir en las labores de achique, excarcelación y desescombro en la zona afectada por la DANA.

Este contingente se une a los efectivos movilizados el sábado, arribando a la zona temprano en la mañana de este domingo, con bomberos procedentes de Santander, Torrelavega, Castro Urdiales y Camargo, además de voluntarios de la Agrupación de Reinosa, quienes se integrarán en el Puesto de Mando establecido por la Generalitat Valenciana en Alzira.

Los bomberos del SEMCA han sido asignados a tareas de achique en Algemesí, mientras que los bomberos forestales de la Dirección General de Montes, junto con los voluntarios municipales desplazados el sábado, se encuentran trabajando en el Barrio Salvador Allende de Alcudia.

El contingente de Bomberos de Santander está compuesto por tres bomberos con un vehículo ligero y equipados con electrobombas, generadores de corriente, herramientas y equipos de protección individual.

Además, se han movilizado cinco bomberos de Torrelavega, tres de Camargo y seis de Castro Urdiales, cada uno con su respectivo equipamiento y vehículos para hacer frente a la situación.

La agrupación municipal de voluntarios de protección civil de Reinosa se ha unido a las movilizaciones anteriores, llevando siete vehículos, 13 motobombas, generadores, un protosocorro, una torre de luz, un calefactor y material logístico y de comunicaciones.

La Consejería de Presidencia, Justicia, Seguridad y Simplificación Administrativa de Cantabria está coordinando la salida de recursos, su capacidad operativa, garantizando la autonomía de los equipos y asegurando relevos de personal. La comunicación y coordinación se realiza a través de la Sala del 112 y el Centro de Coordinación Operativa.

En total, ayer se movilizaron cuatro equipos de bomberos del SEMCA y un grupo de seis bomberos forestales con tres autobombas de gran capacidad, además de ofrecerse el equipo de apoyo psicosocial para gestionar la emergencia.