Santander y grupo Oberig lanzan campaña de ayuda para Ucrania.
El Ayuntamiento de Santander y la asociación de ucranianos Oberig han puesto en marcha una nueva campaña de recogida de material humanitario para Ucrania. La presa de Kajovka, destruida por Rusia, podría afectar a alrededor de 30.000 personas después de 15 meses de guerra.
La concejala de Cooperación al Desarrollo en funciones, Lorena Gutiérrez, subraya que la rotura de la presa es "un desastre humanitario y ecológico sin precedentes". Además, ha pedido a los vecinos que colaboren con diferentes utensilios náuticos que ayuden a los servicios de emergencia y con alimentos o productos de higiene entregándolos en el local que el Consistorio ha cedido a la asociación en el Mercado de México.
Los vecinos pueden colaborar con vadeadores, motobombas, botas de agua, motores, barcas hinchables, pañales para inmóviles, productos de higiene personal, alimentos y agua embotellada. Además, continúa abierta la campaña de donativos a la cuenta habilitada por Oberig.
Gutiérrez ha hecho un llamamiento a los vecinos para que "no se acostumbren al horror" y ha reiterado la condena a la invasión rusa, sumándose una vez más a la petición de la comunidad internacional para que Rusia ponga fin "a la agresión injustificada que está causando miles de muertes y que ahora se está viendo incrementada debido a la destrucción de la presa".
La Concejalía de Cooperación y la Oficina Municipal de Cooperación Social (OICOS) han desarrollado un trabajo importante, sumando la generosidad de vecinos, empresas, instituciones de toda la región y organizaciones como Cruz Roja, la agrupación de Protección Civil de Santander o los Bomberos Voluntarios que se han sumado desde el inicio de la guerra a las sucesivas iniciativas en favor de Ucrania.
Por otra parte, Gutiérrez ha recordado que durante todo este mes de junio el centro cívico de Cazoña acoge la exposición 'Postales contra la guerra'. Las cerca de 300 obras permanecerán a la venta y lo recaudado se destinará a seguir ayudando a las mujeres y niños ucranianos que están padeciendo las consecuencias de la guerra en Ucrania.