Un hombre de 62 años y residente de Campoo de Enmedio, está siendo investigado por la Guardia Civil de Cantabria por un presunto delito de maltrato animal. El caso se relaciona con la muerte de un caballo después de haber recibido un fuerte golpe en la cabeza y dos cortes en el cuello en una finca de la localidad de Nestares.

El instituto armado informó que la noche del 20 de junio recibió una llamada sobre un hombre que estaba parado junto a un caballo caído y cubierto de sangre en la misma finca. Minutos más tarde, los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Reinosa encontraron al hombre con la ropa manchada de sangre cerca del cadáver del animal.

Tras comprobar que el caballo tenía un agujero en la cabeza, presumiblemente causado por un objeto contundente, además de dos cortes en el cuello, uno de ellos para extraer el microchip identificativo y otro para desangrar al animal, los agentes iniciaron una investigación. Las pesquisas confirmaron que el hombre era el responsable del animal y el presunto autor de su muerte. El sospechoso entregó a los agentes el microchip, el cual pretendía dar de baja en la Consejería de Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural del Gobierno de Cantabria.

Al parecer, el caballo presentaba una pata rota, lo que lleva a los agentes a no descartar que el hombre lo matara para evitar gastos veterinarios y un posible sacrificio del animal, junto con el costo de la retirada del cuerpo. @