Crónica Cantabria.

Crónica Cantabria.

Cuevas de altamira, una joya del arte rupestre en Cantabria

Cuevas de altamira, una joya del arte rupestre en Cantabria

Cuevas de Altamira, una joya del arte rupestre en Cantabria

Las Cuevas de Altamira, ubicadas en el norte de España en la comunidad autónoma de Cantabria, son consideradas un tesoro del arte rupestre y una de las más importantes del mundo. Desde su descubrimiento en 1868, las cuevas han sido objeto de estudio y fascinación para expertos y turistas de todo el mundo.

Historia de las Cuevas de Altamira

El descubrimiento de las Cuevas de Altamira se produjo en el año 1868 por el arqueólogo Marcelino Sanz de Sautuola y su hija. En el interior de las cuevas, encontraron una serie de pinturas rupestres en cada uno de los muros que representaban bisontes, caballos, ciervos, entre otros animales.

Durante mucho tiempo, las pinturas de Altamira fueron cuestionadas y consideradas falsas debido a la complejidad y la alta calidad de las mismas. Sin embargo, en 1902, varios expertos reconocieron la veracidad de las pinturas y se inició una campaña para proteger las cuevas y hacerlas accesibles a turistas y expertos.

Arte rupestre en las Cuevas de Altamira

Las Cuevas de Altamira albergan una serie de pinturas rupestres que datan de la época del Paleolítico Superior, aproximadamente entre 35 000 y 11 000 años atrás. Las pinturas representan animales, algunos de los cuales ya se han extinguido, así como escenas cotidianas de la vida de los antepasados de la región. Los pigmentos utilizados en las pinturas fueron elaborados a partir de materiales como la arcilla, los minerales y el carbón vegetal.

La calidad de las pinturas es excepcional y el cuidado y el detalle en cada una de ellas es impresionante. En muchas de las pinturas se puede apreciar el movimiento de los animales, así como los detalles de su pelaje o su anatomía.

Visita a las Cuevas de Altamira

Las Cuevas de Altamira están abiertas al público y se puede acceder a ellas mediante visitas guiadas. Debido a la delicadeza de las pinturas, la cantidad de visitantes está limitada y solo se admiten pequeños grupos cada día.

Además de las cuevas, el complejo cuenta con un museo en el que se explica la historia de la cueva y la elaboración de las pinturas. En las inmediaciones, se encuentra el pueblo de Santillana del Mar, un lugar encantador que es muy recomendable visitar después de la visita a las cuevas.

Protección y conservación de las Cuevas de Altamira

La conservación y la protección de las Cuevas de Altamira ha sido un tema de preocupación constante debido a la delicadeza de las pinturas y el impacto que el turismo y el paso del tiempo han tenido sobre ellas. En 1985, las cuevas y su entorno fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

En la actualidad, las cuevas se encuentran cerradas al público debido a la necesidad de proteger las pinturas. Sin embargo, se pueden visitar sus réplicas ubicadas en el mismo complejo y que son una excelente opción para apreciar la belleza del arte rupestre de Altamira.

Conclusiones

Las Cuevas de Altamira son una muestra incomparable del arte rupestre y uno de los mayores tesoros culturales de España. La belleza y la calidad de las pinturas son impresionantes y la historia detrás de su descubrimiento y conservación es fascinante.

Aunque las cuevas originales se encuentran cerradas al público, las réplicas permiten a los visitantes conocer y apreciar la belleza de las pinturas y la laboriosa tarea de conservar y proteger este tesoro cultural para las generaciones futuras.

Un viaje a Santillana del Mar y las Cuevas de Altamira es una experiencia única para admirar el arte rupestre más excepcional de la humanidad.