La puerta de embarque 1 del Aeropuerto Seve Ballesteros-Santander se someterá a una significativa adecuación con el objetivo de permitir la simultaneidad en la operación de dos vuelos No Schengen.

En este sentido, Aena ha anunciado que en los próximos meses destinará una inversión de 3,4 millones de euros a este aeropuerto, con el fin de realizar diversas mejoras en sus instalaciones y optimizar el flujo de pasajeros, particularmente aquellos que viajan a destinos fuera de la Unión Europea y que requieren control de pasaporte.

Entre los proyectos que se piensan implementar—algunos de los cuales ya están en curso—destaca la construcción de una nueva campa destinada a vehículos de alquiler sin conductor, además de la instalación de nuevas marquesinas para mejorar este servicio esencial. Este reubicamiento de las empresas de rent a car, que actualmente operan en el aparcamiento general, liberará 246 plazas que estarán disponibles para los pasajeros. La nueva área para estas empresas ocupará un espacio de 16.000 metros cuadrados y estará equipada con aproximadamente 400 plazas cubiertas.

Según la información proporcionada por Aena en su nota de prensa, el traslado no solo proporcionará a las empresas más espacio operativo, sino que también mejorará el tráfico en los accesos al aeropuerto, evitando que los vehículos de transporte deban transitar por el vial que se encuentra frente al edificio terminal.

El contrato para llevar a cabo dichos trabajos ha sido adjudicado a la UTE Aparcamientos Rent A Car y tiene un plazo de ejecución de 14 meses, con un importe de 2,79 millones de euros.

En el interior del edificio terminal, ya han comenzado a ejecutarse tres proyectos adicionales que se desarrollarán de manera simultánea, también con el propósito de modernizar las instalaciones y facilitar la experiencia de los pasajeros. Estas obras han sido adjudicadas a la empresa Elecnor Servicios y Proyectos por un total de 611.292 euros.

Una de las iniciativas más relevantes incluye la adecuación de espacios en la planta baja para que la puerta de embarque número 1 pueda ser utilizada de manera dual, sirviendo tanto vuelos Schengen como No Schengen, los últimos de los cuales requieren control de pasaporte. Esta mejora permitirá que dos vuelos a destinos no pertenecientes a la UE se realicen al mismo tiempo, y tiene un plazo de ejecución previsto de cuatro meses, con un coste de 78.943 euros.

Además, se prevé integrar el anexo que actualmente se encuentra junto a la sala de recogida de equipajes en el edificio terminal. Este área, que se construyó en 2022, abarca aproximadamente 290 metros cuadrados y opera por el lado norte como control de pasaportes para pasajeros de terceros países. El proyecto contempla su cierre completo, la instalación de pasillos anti-retorno, y su conexión directa con la sala de recogida de equipajes tras el control documental. La ejecución de esta obra tiene un plazo de cinco meses y su coste es de 194.007 euros.

Con el fin de facilitar el tránsito de pasajeros entre las aeronaves y el edificio terminal, se procederá también a ampliar la acera del lado aire y a reemplazar la marquesina existente por una nueva. Para asegurar la seguridad de los recorridos peatonales durante el desarrollo de las obras, se implementarán pasillos provisionales que estarán protegidos del tráfico. Esta fase será realizada en un periodo de cinco meses, con un costo de 338.341,33 euros.

Aena ha asegurado que todos estos trabajos se llevarán a cabo sin interrumpir la operativa normal del aeropuerto, y se ejecutarán fundamentalmente fuera del horario operativo cuando sea necesario. Estas mejoras se suman a la reciente instalación de una tercera línea en el filtro de seguridad, diseñada para manejar el flujo de pasajeros durante los momentos de mayor afluencia en la salida de vuelos.