Un caso judicial que ha captado la atención mediática en Santander actualmente se encuentra en desarrollo, con la fiscalía solicitando una condena de 33 años y medio de prisión para el acusado, quien ya ha efectuado una indemnización de 2.500 euros a la mujer que realizó la denuncia.

La mujer, que había acusado a su expareja de agresión física y sexual, así como de grabar sin su consentimiento una supuesta violación, ha cambiado radicalmente su testimonio durante el juicio. En una sorprendente declaración el pasado jueves, afirmó que se había equivocado en sus acusaciones, insistiendo en que los eventos no ocurrieron como los había descrito.

Según sus palabras, las relaciones que tuvieron en su hogar tras una discusión fueron consensuadas. En cuanto a la grabación que se convirtió en un punto focal del caso, la mujer alegó que fue parte de un “juego” entre ambos, contradiciendo así su declaración inicial.

“Pido perdón, pero me equivoqué en todo”, comentó la supuesta víctima ante el tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia de Cantabria. Además, aclaró que las lesiones visibles que presentaba se debieron a una caída que sufrió durante el altercado, no a agresiones por parte de su expareja.

El acusado, presente en la sala, también desmintió las alegaciones de agresión y afirmó que la grabación fue realizada con el conocimiento de la mujer, quien, según él, estaba “consciente” y “despierta” en el momento de la grabación. Ambas partes coincidieron en que se trataba de un ejercicio consensuado.

Los acontecimientos que se están juzgando ocurrieron durante un fin de semana a finales de noviembre de 2023, y la grabación en cuestión se realizó a principios de verano de ese mismo año, poco tiempo después de que la pareja comenzara su relación.

Pese a que la mujer retiró su denuncia en enero de 2024, el fiscal sostiene que su testimonio actual ha sido influenciado por el entorno del acusado, sugiriendo que ambos se han puesto de acuerdo para alterar los hechos iniciales. Sin embargo, el ministerio público mantiene que su relato, aunque contradictorio, aún tiene consistencia y pide que se mantenga la acusación.

Los fiscales no han contemplado una posible atenuación de la pena, a pesar de que el acusado ha presentado el monto de la indemnización antes del juicio. La defensa del acusado, por su parte, ha solicitado su absolución, apuntando a que la declaración reciente de la denunciante debilita considerablemente el caso en su contra.