El líder regionalista y hasta ahora presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, se ha pronunciado sobre unos resultados electorales que considera que no son buenos para la comunidad ni para el PRC, al que reconoce que se ha llevado por delante la marea de la derecha del PP y Vox a nivel nacional.

Revilla ha dicho que hablará con todo el mundo de cara a la formación del nuevo Gobierno, aunque da por hecho que es natural y lógico que gobiernen en coalición PP y Vox, porque son prácticamente lo mismo. Considera que la caída del PRC se debe a la marea de la derecha que cree que es el preludio de lo que ocurrirá en las elecciones generales, además de por haber gobernado en coalición con el PSOE cuando a nivel nacional tienen un pacto antinatural que no entendieron muchos españoles.

Revilla ha reconocido que ha influido el caso de corrupción en el Servicio de Carreteras autonómicas estallado dos meses antes de las elecciones, aunque no haya ningún miembro del Gobierno implicado. También lamenta la encuesta del CIS que le atribuía aún mayor caída de la sufrida, porque los votantes suelen apostar a caballo ganador.

Revilla celebra que el PRC tendrá muchísimos alcaldes y se ha mostrado absolutamente tranquilo, aunque ha mostrado optimismo en las últimas semanas. Asegura que va a aguantar en la política toda la legislatura y preparar la campaña de las generales.

Revilla ha advertido que Vox no se conforma con ser muletilla del PP, sino que quiere tener en la mesa primer plato, segundo y postre. Cree que los resultados serán los mismos en las generales a pesar de que esta coalición no es buena y podría desembocar en retrocesos en la comunidad, donde se siente orgulloso de lo que han logrado los regionalistas, que han puesto a Cantabria en el mapa.

En estas elecciones, el PP ha logrado la mayoría absoluta en la capital cántabra y el PRC ha perdido dos concejales, quedándose en tres. Revilla ha lamentado que el candidato del PRC a la Alcaldía de Santander, Felipe Piña, ha tenido un mal debut porque no era suficientemente conocido y además su llegada ha coincidido con la marea popular.