
En un evento celebrado el 28 de marzo, el nuevo portavoz del PSOE en el Parlamento de Cantabria, Mario Iglesias, asumió oficialmente su responsabilidad al frente del Grupo Socialista. Este debut marca el arranque de lo que Casares describe como una "nueva oposición" que se propone ser a la vez firme y constructiva, especialmente en respuesta a los recortes que la administración del PP, liderada por María José Sáenz de Buruaga, ha implementado.
El secretario general del PSOE cántabro, Pedro Casares, estuvo presente durante la primera intervención de Iglesias, quien ha sido designado por la Comisión Ejecutiva Regional como sucesor de Pablo Zuloaga. Juntos, visitaron la sede del parlamento para registrar una interpelación al consejero de Educación, Sergio Silva, quien deberá ofrecer aclaraciones sobre el posible cierre del colegio El Pedregal en Castro Urdiales, una decisión que comprometía a 86 familias, además del preocupante estado del colegio Menéndez Pelayo en Santander.
Casares expresó su confianza en que Iglesias realizará un trabajo "extraordinario" en su nuevo rol y enfatizó que la reciente interpelación ya había sido mencionada durante una reunión con el sindicato CCOO. La respuesta del consejero de Educación y la pronta acción del PP al presentar su propia interpelación indican que la renovada "oposición" del PSOE está empezando a dar sus frutos, según su valoración.
A su juicio, los miembros del PP parecen estar más interesados en evitar una oposición que fiscalice sus acciones y, para ello, planean llevar su interpelación al Pleno con la intención de minimizar el papel de vigilancia que el PSOE podría desempeñar frente al gobierno de Buruaga.
Con respecto al colegio Menéndez Pelayo, que fue visitado por Silva el mismo día para detallar futuras mejoras, Casares subrayó que las comunidades educativas han estado demandando cambios por un tiempo prolongado. Si esta intervención del consejero significa que la "nueva oposición" dará resultados, será bienvenida, agregó.
En el ámbito educativo, Casares también remarcó la importancia de un Pacto por la Educación en Cantabria, argumentando que el sistema no debe enfrentarse a recortes, sino que necesita un aumento en los recursos. Se trata de responder a las "reivindicaciones justas" de los docentes y de "reforzar" toda la estructura educativa de la región.
Asumiendo su nuevo papel, Mario Iglesias agradeció a Casares por la "confianza" depositada en él y manifestó su compromiso de trabajar con "ilusión y dedicación" permanente. Reafirmó su intención de hacer una oposición sólida al gobierno de María José Sáenz de Buruaga y a los recortes que se están llevando a cabo.
En sus primeras declaraciones, Iglesias confirmó que su objetivo será hacer propuestas en todas las áreas relevantes para mejorar Cantabria. "La región necesita reformas y esfuerzo", declaró, enfatizando que los socialistas están dedicados a avanzar en favor de los intereses de todos los cántabros.
Por otro lado, Casares también se pronunció respecto a la dolorosa situación de acoso escolar que ha afectado a un joven con parálisis cerebral en el IES Leonardo Torres Quevedo de Santander. Ante la apertura de diligencias por parte de la Fiscalía de Menores contra varios compañeros, el líder socialista subrayó que el acoso no tiene cabida en la educación en Cantabria y expresó su solidaridad con la familia del afectado.
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