En la Audiencia Provincial de Cantabria y con tribunal del jurado
SANTANDER, 4 Oct.
El juicio del acusado por el impactante doble crimen de Liaño, donde perdió la vida su pareja y el bebé que tenían en común, está programado para el próximo mes de febrero, desde el 7 hasta el 19 del mismo mes.
La fecha del juicio ha sido confirmada en un auto de hechos notificado a las partes involucradas, según información obtenida por Europa Press el día de hoy.
La vista oral se llevará a cabo con un tribunal del jurado en la Audiencia Provincial de Cantabria y la causa ha sido seguida por el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Santander.
La Fiscalía y otras partes interesadas, incluyendo las acusaciones y la defensa, habían solicitado el procedimiento de juicio oral para José R., acusado de asesinar a su pareja de 40 años y a su bebé de once meses en diciembre de 2021 en Liaño, un lugar perteneciente al municipio de Villaescusa.
Desde que ocurrieron los devastadores hechos, José R. ha estado en prisión preventiva y ahora enfrenta la posibilidad de una condena de prisión permanente revisable solicitada por el ministerio público, las acusaciones particulares y la acción popular, en contraposición a la absolución que busca la defensa.
La Fiscalía pide la pena máxima por la muerte del bebé, 25 años de cárcel por el fallecimiento de la mujer y un año adicional por incumplimiento de una orden de alejamiento que tenía sobre ella y que se dice habría violado en dos ocasiones ese día.
Las acusaciones señalan que los crímenes fueron ejecutados con alevosía y ensañamiento, con la presencia de agravantes como el parentesco y la discriminación de género. Además, se le acusa de un delito continuado de quebrantamiento de condena con reincidencia.
Las partes acusadoras, incluyendo a los familiares de las víctimas y la acción popular del Gobierno de Cantabria, piden también la prisión permanente revisable para José R. por el asesinato del bebé y una adición de 25 años por el asesinato de la mujer.
Los crímenes tuvieron lugar en la residencia familiar de las víctimas en Liaño, donde fueron encontrados sin vida la madre de 40 años y su hija el 17 de diciembre de 2021, con heridas de arma blanca que aún no han sido localizadas.
Los expertos forenses sitúan el momento de la muerte entre las siete de la tarde y las nueve de la noche del día anterior. Desde entonces, el acusado, de 43 años, se ha mantenido en custodia preventiva primero en la cárcel de El Dueso en Santoña y luego en la de Dueñas en Palencia.
A pesar de alegar su inocencia y negar su implicación en los hechos, José R. es el único sospechoso en este caso, con varios testigos que lo situaron en la escena del crimen en el momento de la tragedia.
Adicionalmente, los registros de geolocalización de los teléfonos móviles del hombre y la mujer coinciden en tiempo y lugar, ubicándolo en el lugar del crimen en el momento en que ocurrió, según las investigaciones.
Además, los datos de los repetidores y antenas de telefonía muestran los movimientos del acusado después de los crímenes, indicando que permaneció toda la noche en la casa y se marchó alrededor de las seis de la mañana del día siguiente.
Los investigadores no han encontrado ADN de otras personas en la escena del crimen, confirmando que el acusado actuó solo en esta tragedia que conmocionó a la comunidad. Solo se encontraron restos genéticos de las víctimas y del propio sospechoso en la casa familiar, incluso en la mantita con la que fue envuelto el bebé.
Se sospecha que los asesinatos ocurrieron luego de una intervención de la Guardia Civil tras una llamada de la mujer alertando sobre la presencia del hombre en la residencia, a pesar de tener una orden de alejamiento emitida por el Juzgado de lo Penal número 5 de Santander, que habría violado en dos ocasiones en un mismo día.
Después de que los agentes permitieran que el sospechoso se fuera, la Benemérita inició una investigación interna y sancionó a los tres efectivos involucrados, incluyendo a un sargento. La Audiencia Provincial de Cantabria posteriormente rechazó imputarles por un doble homicidio por imprudencia profesional.
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